Rico amante del BDSM es torturado por la vidwos xx invitada Jill Cassidy
Un tipo rico firma un contrato de tortura con Jill Cassidy. La niña se condena deliberadamente a la tortura, cuyo acorde final será el sexo. El saco gordo tiene derecho a atar al invitado, amordazarle la boca, conducir a la perra con una correa y masturbarle el coño de forma agotadora. El pervertido tiránico tiene una vidwos xx sala equipada para juegos BDSM. A partir de ahí, la niña se marchará cuando cumpla con todas las condiciones prescritas en el contrato.